La desregulación del transporte de larga distancia podría hacer que las empresas descarten las rutas que no son rentables

Esto podría afectar a los pueblos de menos de 10.000 habitantes y a los destinos turísticos fuera de temporada.

Además, la desregulación podría generar una reducción del servicio en estas áreas y permitir que las empresas establezcan de forma libre recorridos, horarios, precios y duración de los servicios.

Es importante mencionar que la desregulación también podría traer beneficios como la posibilidad de que las empresas ofrezcan servicios más personalizados y flexibles, pero es necesario considerar también los posibles impactos negativos en las áreas mencionadas.